| 0 comentarios ]

Un tema que se desprende del proceso electoral tiene que ver con los cambios que sobre la perversa e inconstitucional LOPE deben darse en la nueva Asamblea. ¿Cómo fue posible que una minoría obtuviera una mayor cantidad de representantes? Semejante ingenuidad no puede volver a ocurrir en los procesos electorales futuros. Los poderes públicos deben expresar la nueva correlación de fuerzas para bien del país.

Al margen de ese debate, la oposición debe afianzar la confianza ganada por los electores. Los partidos políticos tienen que mostrar mayor desprendimiento y dejar de lado sus intereses grupales. Deben abrirse a las demandas de los ciudadanos e incorporarlos al debate constante. Ello pasa por superar las viejas prácticas que los aisló del sentimiento popular. En las elecciones de concejales y concejalas que se avecinan, como señal de apertura y desprendimiento, deben promocionar las primarias en todos los circuitos del país y reservar para ellos únicamente las listas. Ese debiera ser el clima democrático imperante como el mejor preludio a las elecciones presidenciales del 2012.
Sobre el rol de la nueva Asamblea en la vida política del país habrá que decir que dependerá mucho de la disposición de los actores. Existe, y es el clamor de todo un pueblo, la posibilidad que desde la Asamblea se irradie al país el fin de la polarización estéril. Los venezolanos esperan que se abra canales de entendimiento entre los factores y que fluya una comunicación de mayor respeto y altura que la mostrada hasta nuestros días. Existe la necesidad de llegar a acuerdos importantes en materias urgentes para el país.
Sin embargo, el avance a troche y moche de un proyecto claramente fracasado en el tiempo traduce la actitud innegociable de los partidarios del gobierno. Los parlamentarios de la democracia deben tener una respuesta frente al sectarismo, la imposición y la arbitrariedad oficialista. Para muchos diputados del gobierno llegar a acuerdos será traicionar el proceso político que ellos representan. ¿Qué hacer y cómo actuar en una Asamblea en la que de entrada está negado el debate? Es una materia en la que deben ir trabajando desde ya los nuevos diputados de la unidad democrática. De ser así, el clima político del país en el 2011 se presentaría tenso y muy enrarecido, sin que ello signifique abandonar la ruta democrática.
La nueva correlación de fuerzas es gracias al voto. Los resultados del 26 de septiembre fueron la expresión de la firme convicción democrática del país que supo conquistar esperanzas en los corazones de miles y miles de venezolanos a pesar del ventajismo gubernamental. Hay muchas tareas pendientes y son varios los escenarios que se vislumbran, aún así, por muy difíciles que sean los retos que debamos asumir, la vía democrática sigue siendo el camino cierto. La historia ha dado un sin número de ejemplos en los que ha sido posible salir de los gobiernos totalitarios por la vía democrática.
El voto silencio, humilde y esperanzador de los ciudadanos ha sido el gran protagonista. ¿Quién lo niega? Es la fuerza de un país que no se entrega en su incansable lucha por conquistar una anhelada justicia en paz y libertad.

0 comentarios

Publicar un comentario

 
Share